domingo, 29 de julio de 2007

Política y Economías. Volviendo a lo básico (II)

Barcelona y la economía de la proximidad (I)

Hace algunas semanas atrás, hacíamos un comentario (*) sobre el éxito del programa Barcelona Bicing. Claramente, el programa es sólo un indicador de una ciudad que apuesta, en su economía, a volver a lo básico. Puesto que es desde lo básico, desde donde, logra y logró, construir su esplendor.

Volver a lo básico significa generar las condiciones políticas y económicas para generar un modelo de proximidad. Es realmente increíble caminar por los diferentes barrios de la ciudad y observar el apogeo de sus calles comerciales.

Calles comerciales en medio de los barrios que compiten de igual a igual con tiendas gigantes como “El Corte Inglés” o el “Fnac” y que a la vez ofrecen un mejor acceso para clientes que no gustan de caminar la asombrosa avenida “Passeig de Gracia” con sus tiendas de nombre internacional.

La apuesta de la ciudad está en fortalecer lo local: cultural, comercial y socialmente. Frente a los desafíos y oportunidades de la globalización, la ciudad apuesta claramente a fortalecer los vínculos de mayor proximidad. Apuesta, sin más, a localizarse dentro del mercado global.

Así, Barcelona se transforma poco a poco en un destino ideal para los capiteles Europeos (cabe destacar que la ciudad cuenta con dos de los mejores departamentos de economía de Europa), en un destino turístico importante, en un polo de atracción artístico y, está intentando, convertirse también en un centro de importancia en ámbito de la ciencia.

En este contexto, la proximidad es la clave. Los barrios de la ciudad compiten por ofrecer mejores atracciones. Las calles comerciales florecen, se cuidan los lazos vecinales y se invierte en polos culturales y comerciales. Un ejemplo de ellos es el centro de Fort Pienc. Cuenta con una biblioteca con un considerable número de ejemplares, con acceso a Internet inalámbrico, con una hemeroteca ejemplar, con una guardería, con una filmoteca increíblemente buena. Además, ofrece espacios para eventos. Todo ésto en medio de un barrio y, claro está, junto a una explanada que auspicia de lugar de encuentro vecinal. El centro, y ésto es lo destacable, está junto al mercado del barrio. Vecinos, niños y ancianos comparten un espacio mientras que realizan sus compras. Frente al modelo impersonal de lo hiper, Barcelona vuelve al mercado.

Se destaca también el polo de atracción que generó el barrio de Gracia. Con su “aire” cultural y sus cines en VO logró revivir un esplendor comercial y artístico sin renunciar a su espíritu de tranquilidad barrial. Los comercios, claro está, encantados. Gracia se convirtió en el lugar más buscado por profesionales jóvenes que desean habitar un microclima de tranquilidad y oportunidades.

No sólo los barrios de Barcelona ofrecen este tipo de atracciones, sino que también los locales “barriales” se especializan sin perder su “alma” de “proximidad” con el vecino. Relojerías ofreciendo relojes de primera gama, casas de ropa cuyos nombres son un apellido (cosa que se destacó en Mackinlay`s) y que ofrecen, a su vez, prendas de marcas líderes. Ramblas que ofrecen restaurantes y heladerías para el paseo nocturno. La foto final es realmente extraordinaria.

No sólo los barrios de la ciudad viven en y por la proximidad. Las comarcas y los pueblos que rodean a Barcelona hacen lo propio. El Garraf, por ejemplo, ha convocado a una unión de industriales cuya importancia económica es considerable. La apuesta de este grupo es, claro está, la de afianzar vínculos sociales y económicos con la región donde está ubicada. La vida política y económica de los pueblos y comarcas no está, por tanto, lejos del ciudadano. Otra vez, la apuesta por lo local, lo vecinal, lo cercano.

Todo esto por una apuesta sencilla: la proximidad.

Barcelona vuelve a mostrar como, frente a los desafíos de la economía actual, volver a lo básico no es mala idea; al fin y al cabo, en la proximidad se generan las condiciones básicas para el intercambio y el compromiso. Otra vez, una apuesta para mejorar la vida de los ciudadanos de a pie.

Por.

N.P

(*) Fue asombroso ver una nota de tapa -en clarin online- sobre el programa BCN BICING, unos días después de la aparición en nuestro blog de la reflexión sobre las Bicicletas. Mas asombroso ha sido enterarnos por clarin online que se ha presentado un proyecto en la legislatura porteña para implementar un sistema de Buenos Aires Bicing. increíblemente grato!.

3 comentarios:

Alea Iacta Est dijo...

Estimado Hugo,
Sin querer, intentando editar un error en la entrada la borré, y con ella su comentario. Mis disculpas.

Slds.

Nicolás
Ps. ahora volvi a poner la entrada pero no logro recuperar el comentarios.

Anónimo dijo...

no se haga problema nicolás, lo importante es que usted lo haya leeído

Nicolás Patrici (BRIDGES-LAC) dijo...

Si hugo, lo leí. Solo decirle que estoy 100 por ciento de acuerdo con Ud.
Lo interesante de estos espacios esa esa mezcla entre socialización y comercio. Algo sobre lo que espero volver, ya que esa ha sido "la" pérdida de la Argentina. Se vulgarizó y se marginaliza aquello que en otras sociedades hace de pilar; lo que es peor, el discurso oficial acusa a "los fantasmas del mercado" de esa pérdida, cuando en el mundo esos fantasmas no son fantasmas sino que son completamente compatibles con ese espacio.